El periodo que se inicia presentará los mayores desafíos de gobernabilidad que un Presidente haya experimentado desde el retorno de la democracia. Un gobierno reformista, con una coalición ideológicamente dispersa y en formación, sin experiencia de gobierno, en un contexto de reordenamiento de las fuerzas políticas, deberá lidiar con un sistema político fragmentado y polarizado, una economía en camino a la estanflación, crisis de orden y seguridad a lo largo de todo el país, la persistencia de la pandemia, una sociedad tensionada, el preocupante curso de la Convención Constitucional y un escenario externo conflictivo. En este contexto, este informe analiza las principales tendencias que pueden determinar el curso que tome el gobierno del Presidente Boric, entre un progresismo moderado y una izquierda más extrema.